Me entero por el notable blog Desde el Tercer Piso que el ex procurador Antonio Maldonado ha sido condenado a pagar 1,000 soles al señor Vice Presidente de la República Luis Giampietri como compensación por su honor.
Esta sentencia es irónica y así hay que interpretarla. Me recuerda el libro de León Uris, que fue llevado a la pantalla, llamado QB VII. En él León Uris relata la historia del juicio que el médico polaco Adam Kelno le hace al escritor judío norteamericano Abraham Cady por difamación y por haber afectado su honor. Kelno acusa a Cady de haberlo mencionado como responsable de haber participado en experimentos médicos en los campos de concentración nazis. La demanda era por varios millones de libras esterlinas "para restituir su dañado honor". Al final el tribunal de la Reina , QB VII, le dio la razón en la demanda, pero ordenó que se le pagara un penique, un centavo de libra, eso era lo que para la justicia británica valía su honor.
La legendaria ironía británica al máximo. Podría compararse a la distancia con los mil soles de reparación que se le dan a un personaje que defiende a Fujimori, que es amigo del varias veces acusado de corrupción Alex Kouri, que se tomó fotos con Montesinos y tuvo una participación lamentable en la masacre del Frontón, en la época del primer gobierno de Alan García. Si esas juntas no dañan el honor del señor Giampietri entonces de qué estamos hablando.