Es preocupante que el gobierno demuestre que, ante el rebote inflacionario, no sabe que hacer. En gira rayana en lo turística, el señor Alan García y su funcionario encargado de las finanzas, Luis Carranza, han olvidado que estamos en un mundo que reconoce la distancia cero como fundamento virtual y no han dicho nada, a la distancia, sobre la caída de la bolsa y del peligroso rebrote inflacionario en el país.
Demostrando desesperación, síntoma que no sabe que hacer, el Dr. Alan García deslizó en un almuerzo con empresarios importadores la posibilidad de un control de precios. ¿A qué se debe esta propuesta? ¿Será que una vez más el Dr. García se siente engañado? Razones no le faltan. Su funcionario Rafael Rey, en nombre de muchos empresarios, le pidió rebaja de aranceles y -cómo no- el señor García les dio rebaja de aranceles. Sin embargo los precios no bajaron.
El dólar bajó en el tipo de cambio y sin embargo los precios tampoco bajaron. Menos impuestos y un dólar barato deberían haber abaratado el precio de los alimentos importados. Pero el trigo y la harina no bajaron, más bien siguieron subiendo, demostrando la incapacidad del gobierno para regular.
Perú 21 nos muestra hoy una tabla que indica cómo se han disparado los precios de artículos de primera necesidad. Observemos:
Carne: sube de 14 soles en diciembre 2007 a 18 soles, es decir casi 30%.
Leche: sube de 2,10 soles en diciembre 2007 a 2,50 soles en enero 2008, es decir casi 15%.
Aceite: de 5,70 soles a 7 soles es decir casi 20%.
Cebolla y Papa: de 0,70 soles el kilo a 1,00 es decir casi 40%.
Y paro de contar. Los precios se han incrementado en un promedio de 30% en tan sólo 20 días del mes de enero de este año.
¿Lamentable no? Pero no olvidemos que la culpa no sólo es del gobierno sino de una oposición congresal que no entiende su papel y de los medios de comunicación aúlicos que no han aprendido la lección que dejó el fujimorato. Los medios, por ejemplo, hoy nos venden la idea de la recuperación de la Bolsa como un síntoma de recuperación de nuestra economía. Nuestro problema no es tanto la Bolsa, siendo esta importante, sino la inflación que ya está causando un serio deterioro en la economía de los más pobres.
¿Y Luis Carranza el funcionario gastador? De hecho ha viajado a España para solicitar su reingreso al BBVA, su banco empleador.
martes, 22 de enero de 2008
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