jueves, 24 de enero de 2008

Secretario General de la OEA se parcializa con Bolivia

El Secretario General de la Organización de Estados Americanos, el chileno José Miguel Insulza, se ha declarado como un "ferviente partidario" de que Chile y Bolivia resuelvan sus diferencia limítrofes y restablezcan sus relaciones diplomáticas.
Es obvio que, como chileno, el señor José Miguel Insulza puede declarar lo que le venga en gana. Pero como Secretario General de la OEA debe ser respetuoso de los tratados, de los convenios, y de cuidar las formas diplomáticas que su alta investidura exige. Ser Secretario General de la OEA no sólo es un puesto bien remunerado, también es uno que reclama altas responsabilidades y cualidades para el cargo, responsabilidades como por ejemplo la de leer, con detalle y objetividad, el alcance de los Tratados internacionales.
Eso no lo debe ignorar el señor José Miguel Insulza. Por tanto debe estar al corriente que discutir el acceso al mar por territorio que antes fue peruano, debe ser discutido también con Perú. Como se sabe, por declaraciones de altos personeros del gobierno chileno, el vecino del Sur le habría planteado una salida al mar a Bolivia por Arica o Tarapacá.
Al Secretario General de la OEA le gusta expresarse como paisano del vecino del Sur "Soy ferviente partidario de que Chile y Bolivia encuentren caminos de entendimiento y resuelvan los temas pendientes. Creo que eso es lo que quiere la Comunidad de las Américas. Yo, como chileno, quiero que la relación entre Chile y Bolivia vaya cada día mejor y que sus problemas puedan ser solucionados a través del diálogo y la concertación entre los dos países" dijo hoy, tal y como consigna La Tercera.
Y a todo esto ¿qué dirá nuestra Cancillería? ¿Qué expresará el Dr. Alan García? . Los miembros del ejecutivo que todavía confían en las cuerdas separadas, los congresistas ¿dirán algo?.
José Miguel Insulza no debe utilizar su cargo de Secretario General de la OEA para hacer campaña política interna. Se sabe que quiere posicionarse como líder de la Concertación. Que lo haga pero sin utilizar un cargo internacional que exige sobriedad, discreción y objetividad y no la torpeza de un tanque alemán que recorre una vereda.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cuando el "brand new" Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, se puso a tono, e igual que muchos aplicados serviles a Washington, declaró sobre la política interna venezolana, desconociendo abiertamente la "libre determinación" de los pueblos que, dado su cargo, debería a pie juntillas respetar, muchos "demócratas" del patio salieron airosos y enojados a "corregir" a Hugo Chávez porque públicamente lo llamó "pendejo" de la "P" a la "O"..!

José Miguel Insulza, alcanzó el máximo cargo de la OEA, esto es de Ripley, gracias a los aupicios decididos de la Venezuela de Hugo Chávez que se enfrentó a los EEUU y a su títere candidato.

Con hidalguía el Secretario Insulza, se vio precisado a reconocer su error. Pidió disculpas al presidente caraqueño y, para la Historia, se quedó con la 'pendejada' encima. Los chilenos, tan quisquillosos con su nacionalismo, en silencio tuvieron que meterse la lengua al bolsillo y cargar en hombros la copa latinoamericana del gran huevón Insulza..!

"Our son of a bitch..."

Los peruanos, en cambio, cuando Chávez llamó al famoso "hortelano" con los adjetivos que todos lo llamamos, una suerte de Cordell Hull, el ex secretario de Estado norteamericano, que allá por 1978 tuvo a bien llamar al dictador dominicano, Leonidas Trujillo, "nuestro hijo de puta", para apuntar que este malvado personaje hacía exactamente todas las atrocidades que Washington pedía; los peruanos, --según la prensa chicha reportó-- nos "achoramos" por la falta de respeto y la "intromisión" del presidente bolivariano con nuestro distinguido y rechoncho "hortelano".

Referente al cambio de la política exterior de Chile con Bolivia, es lo sensato, porque el viejo odio y racismo de Diego Portales no podía seguir conduciendo sus relaciones exteriores. Además, a Chile no le queda otra que plegarse a Perú o Bolivia, como sutil y mañosamente viene haciéndolo con Perú. Dada la escasez de agua y de fuentes de energía que carece Chile, si la montaña no viene, Mahoma va a la montaña, y eso pareciera que finalmente está ocurriendo.

Sin embargo, hay mucho pan que rebanar, aunque de la administración hortelana no se puede esperar nada bueno.

Perú hace mucho tiempo debió haberle dado salida soberana al mar a Bolivia y ganárselo para siempre. El desarrollo y las fuentes de energía que requiere Chile en ese caso, dependerían de esta nueva "coalición" peruanoboliviana. Por lo demás, ya Argentina había hecho algo parecido.

That's me