sábado, 25 de agosto de 2007

Alemania evitará inversores extranjeros en áreas estratégicas

Mientras en nuestro país un funcionario como David Lemor anuncia la venta de gas a Chile y las inversiones del vecino sureño se siguen incrementando peligrosamente en Perú, en Alemania, y antes en la Francia de Sarkozy y en la Inglaterra de la era Blair, se hace todo lo contrario: se cierran las puertas a los capitales peligrosos para los intereses nacionales (El País, España, 25 de agosto del 2007).
Claro que por allí saldrán los defensores de intereses económicos a decir que nosotros no somos Alemania y no tenemos los recursos que ellos manejan. En buena hora. Ello significará que no han entendido nada. El cierra puertas a las inversiones es selectivo. Bienvenido el capital que no altere el equilibrio geopolítico. Bienvenido el dinero del país que no tenga diferencias con la nación receptora. Bienvenida la inversión siempre y cuando no sea en áreas consideradas estratégicas.
Porque sí existen áreas estratégicas, que no deben ni privatizarse ni entregarse a inversionistas que alteren el equilibrio geopolítico.
En nuestro país, Perú, cada vez que se ha hablado de empresas estratégicas, los defensores del "libre mercado" han acusado a los que se oponen a esta medida de trasnochados y anacrónicos.
Está muy mal que Chile sigue invirtiendo en actividades no sólo estratégicas (puertos, embarcaciones, energía eléctrica, gas, agua, minería) sino comercial-detallistas. La economía chilena ya tiene fuerte influencia en la política peruana, tan débil y dependiente de ciertos medios de comunicación.
De allí la necesidad imperiosa de detener el tratado de libre comercio con Chile.
Ya la Fuerza Aérea ha pérdido en manos de un consorcio extranjero, que algunos dicen manejan testaferros que ocultan el capital chileno, aeropuertos que servían a nuestros aviones: Chiclayo y Pisco entre ellos, la pregunta es ¿Hasta dónde vamos a llegar?. El colapso de Ica ha demostrado que en la capital del boom agroexportador no funcionaron los teléfonos españoles ni mexicanos ni la luz en manos chilenas, el Estado no estuvo presente porque todo se vendió, sin criterio selectivo.
Inglaterra, Francia y ahora Alemania le cierran las puertas, selectivamente, a los capitales rusos y chinos. Antes Estados Unidos le cerró la posibilidad de venta de un puerto a un país árabe. En nuestro país los cabilderos y los que prefieren la billetera del corto plazo al desarrollo sostenible entregan nuestras actividades estratégicas a Chile.