martes, 14 de agosto de 2007

Tratado de Libre Comercio con Chile se debe suspender

Bolivia utiliza, eficaz y dignamente, su ventaja comparativa del gas y el agua para presionar a a Chile por una salida al Mar. Al revés, Perú cede todas sus ventajas comparativas, en nombre del mercado y de la "hermandad" a Chile , a pesar de tener problemas de usurpación de territorios por parte del vecino del Sur. Si no fuera por el derecho, que nos asiste, no tendríamos forma de presionar en el reclamo justo que hacemos de nuestro territorio.

También al revés de Perú, en Bolivia la clase política ha cerrado filas con la clase mediática y empresarial. Hay una dignidad colectiva que les sirve en sus procesos de negociación. En nuestro país los intereses chilenos son tan fuertes que ya influyen, no sólo en lo político, sino también en lo mediático. Basta con ver la forma como algunos titulares de viejos diarios han intentado hoy, en Perú, minimizar el delicado tema fronterizo.

Voceros del gobierno dicen que, en las actuales circunstancias, todo está bajo control. No creo eso. Es difícil confiar en el presidente García. Antes que su canciller, y esto lo subrayo, antes que su canciller, el señor García Pérez había intentado ridiculizar los reclamos de compatriotas por los terrenos usurpados en Chile en Tacna. Son unos cuantos metros, dijo en esa primera oportunidad. Luego el canciller García Belaúnde intentó minimizar también el tema comparando, penosamente como constará en los registros de la Historia, al territorio usurpado con su chacra en Cañete.

Perú tiene ventajas comparativas que necesita con urgencia Chile. Tenemos gas, agua, climas diversos, tierras privilegiadas y un mercado en crecimiento. En lugar de utilizarlos en nuestros procesos de negociación se lo hemos entregado a Chile a cambio de migajas. En nombre del libre mercado algunos sujetos se han llenado los bolsillos sin interesar el futuro del país.

Debe suspenderse de inmediato el Tratado de Libre Comercio con Chile. Los empresarios chilenos deben saber que no habrá sostenibilidad para ese tratado en la medida que no sea aprobado por el Congreso peruano. Si los actuales parlamentarios no lo hacen deberán tomar nota que llegará el día en que en esas curules habrá una bancada verdaderamente defensora de los intereses nacionales. Y eso no es chauvinismo. Como no es chauvinismo lo que hacen los políticos chilenos o bolivianos cuando defienden los intereses de sus respectivos países.

Este gobierno, el de Alan García, ha engañado a la población peruana diciendo que es un Acuerdo Ampliado lo que es un Tratado de Libre Comercio. De ese engaño son cómplices los miembros del gabinete presidido por Jorge del Castillo, principalmente la ministra de comercio exterior Mercedes Araoz y el canciller José Antonio García Belaúnde. La soberbia de los primeros días, que hasta ahora los acompaña torpemente, los llevó a consumar ese atropello contra la nación.

El Tratado de Libre Comercio con Chile debe suspenderse de inmediato. No podemos seguir actuando ingenuamente. La dignidad y los derechos de una nación no van por cuerdas separadas. Ese es el argumento del entreguismo que encarna el gobierno de Alan García.