domingo, 5 de agosto de 2007

Un balón de oxígeno llamado Pacto Social

El gabinete actual ya no tiene credibilidad. No pasó ni una hora de la culminación del mensaje Presidencial y empezaron las contradicciones. Ninguno de sus miembros supo explicar en qué consistía ese anuncio del "pacto social". Aún más, las contradicciones llegaron hasta el mismo militante aprista que se había reenganchado con la burocracia, al recibir el encargo del nuevo ente oficial.

El Dr. García Toma no sabía que hacer y eso se demostraba en que ni siquiera sabía que decir.

El desgaste del gabinete se empezó a hacer cada vez más evidente. Luego del pedido de paz y amor del presidente y de sus "disculpas" públicas por los insultos contra los maestros, arreciaron de nuevo los adjetivos, los agravios, los enfrentamientos y los líos de corrupción.

Los insultos provenieron del Premier Jorge del Castillo, adjetivando airadamente contra una oposición moderada que le señalaba sus múltiples errores.

Los agravios también llegaron de una Ministra, Susana Pinilla, que sabe poco del tema laboral. Traidores a la patria llamó a los sindicalistas que se oponen al TLC, con tan poco criterio que lo hizo a tan sólo cuatro días de la llegada de la misión de congresistas norteamericana a la que ella había visitado anteriormente. Olvidaba que fueron los militantes apristas, con el presidente García a la cabeza, los que sabotearon el TLC durante el gobierno de Alejandro Toledo.Si no hubieran hecho eso ya tendríamos el Tratado. Siguiendo su lógica los traidores a la patria son los actuales gobernantes.

Es otro alto funcionario, Luis Carranza, el que torpemente se niega a ordenar se cumpla con la partida presupuestal del Poder Judicial. Entorpece el proceso de modernización de ese ente, y con su mediocre actitud colabora con la destrucción de confianza en el país.

La corrupción notoria tiene serios indicios en varios sectores ministeriales. En Vivienda con Hernán Garrido Lecca, con su socio José Antonio Chang en Educación, con el congresista Luis Alva Castro en el Interior y con la señorita Verónica Zavala en Transportes. Cada cual tiene su rosario de acusaciones, en menos de un año de gobierno. Estas van desde compra de contenidos en los medios de comunicación, pasando por reparaciones ficiticias de colegios, compras indebidas de computadoras, irregularidades en las licitaciones de patrulleros, licencias incorrectas a militantes apristas en determinadas rutas de transporte y una tolerancia que ha pasado de "cero" a la mayor tolerancia con la incompetencia ministerial en administrar los caminos y rutas de nuestro país.

Ante ello el diario El Comercio quiere ejercer un blindaje del gabinete ministerial con sus increíbles notas sobre el "pacto social". Ya no es el deber de saber informar. Ahora se blinda cualquier cosa como conejos sacados de la manga y maniobras distractivas.

Es el Perú del llamado Mal Menor, que simplemente no sabe como gobernar nuetro país.

Al final pensamos que esta maniobra del "pacto social" es tan sólo un recurso extremo, un balón de oxígeno para un gabinete moribundo que requiere con urgencia de cambios. Los cambios son necesarios cuando el mal desempeño empieza a afectar la marcha del país.En algún momento pensé que era el "estrés" del cual hablaba desde el primer mes el Premier. Hoy nos damos cuenta que no era así. Era simple incompetencia.