Ante la andanada de acusaciones de corrupción que alcanzan al INEI, a través del descubierto convenio con el Seguro Integral de Salud SIS, y ante la ausencia de un manejo técnico del Censo Nacional de Población lo lógico es que se cancele.
No que se suspenda, que se cancele.
Este censo no es producto de una adecuada planificación ni de una auditoría al censo efectuado en el año 2005. Es fruto de la febril imaginación presidencial, a quién un día, en plena conferencia de prensa se le ocurrió la infeliz idea para el país, de hacer un censo como aquellos que se hacían en su niñez, en los días de radio, en que la gente se quedaba inmovilizada en casa.
Y como los caprichos presidenciales tienen que cumplirse, por pseudo ministros que han devenido en cómplices, pues adelante. El censo se empezó a "programar". Como es obvio lo primero que pidieron es plata. Total, hay y abundante, se presta pues al despilfarro.
Estamos a 4 días del deprimente y mal organizado evento censal, el cual ya está costando millones de soles de gasto al erario nacional. Y todo parece indicar que va a la deriva.
Este gobierno, el de Alan García, que está demostrando una permanente incapacidad para gobernar, que no puede comprar ni chupetines (Lourdes Alcorta dixit), que no sabe que hacer con la economía y que está despilfarrando el dinero de todos los peruanos y que se encuentra envuelto en muchos casos de corrupción, es el mismo gobierno que se queja que los gobiernos regionales no "sepan gastar" y que no se haga "obra" en los gobiernos locales.
Se sabe que la fiebre corrupta, que ha enloquecido a los malos apristas, también se está dando en varios municipios, a cargo de militantes que se esfuerzan en seguir el ejemplo que viene de las altas esferas del poder central.
A cuatro días del censo está ocurriendo lo siguiente:
1. Niños de 14 años, sin experiencia ni capacitación, serán empadronadores.
2. En las alturas de la Sierra y en la Selva y en la zona rural de la Costa no se sabe nada del censo.
3. Se descubre un convenio corrupto entre el INEI y el SIS que pretendía que este último, el Seguro Integral de Salud, sea el proveedor de etiquetas del INEI para el Censo. Se presume que este convenio fue patrocinado desde los más altos niveles del gobierno.
4. Se está gastando una fortuna en propaganda que no dice nada.
5. Jorge del Castillo dice que empadronarán también funcionarios públicos "voluntarios". Esta noticia la da a cuatro días del censo. Funcionario, dicho sea de paso, que se niegan a este esfuerzo, por tanto lo harán de mala gana y que a la fecha no han sido capacitados.
6. El INEI anuncia, a pocos días del censo, que también empadronarán reclutas del ejército, muchos de ellos semi-analfabetos.
7. El gobierno seguirá perdiendo autoridad pues la ciudadanía amenaza seriamente con no cumplir con la disposición de estar inmolizado peligrosamente en las casas.
8. Las instrucciones logísticas del censo son contradictorias.
9. La data que se consiga en las cédulas censales será de mala calidad por lo tanto la información que se construya también será de pésima calidad.
10. La "experta" en políticas públicas la señorita Verónica Zavala no le ha dicho al señor García del pésimo diseño del "censo".
Cada vez queda más en evidencia que el segundo gobierno de Alan García marcha en línea recta a ser peor que el primero. No sólo hay incapacidad para gobernar sino que estamos involucionando como sociedad.
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