Es penoso que por la prensa extranjera nos enteremos que la Malaria, erradicada hace 40 años de nuestro país, haya registrado 64,000 casos en los últimos meses. Así lo informa, en su edidión de hoy, el prestigioso diario británico The Guardian.
He sostenido que uno de los indicadores de gran corrupción es el deterioro de los servicios públicos, más aún cuando hay tanto dinero como ahora. El Instituto Nacional de Salud a través de su unidad de Vigilancia Epidemiológica ha tenido que detectar la aparición del vector de la malaria. No lo ha hecho. El mosquito se ha paseado a sus anchas, contagiando a 64,000 personas de los cuáles la mitad están en la selva amazónica según nos informa The Guardian.
El Ministro de Salud, como todo parece indicarlo, una vez más no sabe nada sobre el asunto. Pero esta actitud, que podría ser una reafirmación de su capacidad, no se condice con el blindaje que le hace la bancada aprista, que no es lo hábil que afirma la prensa, sino que abusa de una oposición que no entiende cuál es su papel y los alcances de su propio reglamento.
Si el APRA blinda al Ministro de Salud es porque otro u otros deben ser los responsables de tanto deterioro en dicho sector.
¿Se preocupará de esto la señora Carolina Lizárraga?