Estoy convencido que el grave escándalo del SIS es tan sólo la punta de la madeja de lo que viene sucediendo a nivel gubernamental. Licitaciones a dedo, consultorías fantasmas, ministros mentirosos, lobbies descarados y presiones y pedidos de pájaros de alto vuelo, son tan sólo algunas de las características del segundo alanismo.
En ese sentido es penosa la actitud de la oposición congresal en el tema específico del Sistema Integral de Salud. Al unísono, sospechosamente, dicen que el problema no es con el ministro Carlos Vallejos sino con los funcionarios. Digo sospechosamente porque por lo menos el responsable político de los escándalos en Salud es el ministro, quién cínicamente es defendido por el premier Jorge del Castillo y el presidente Alan García, abonando las afirmaciones de quiénes sostienen que el ministro es "protegido" desde los más altos niveles del estado.
¿Por qué la señora Carolina Lizárraga, funcionaria adscrita a la PCM, no investiga a plenitud el caso del SIS plagado de corrupciones? ¿Por qué el congresista Mauricio Mulder no publica el padrón de militantes del APRA? ¿A qué le teme? ¿A que nos demos cuenta que las consultorías fantasmas o las licitaciones a dedo son ganadas por militantes del aprismo?
Por otro lado sigo pensando que la detención de Julio Espinoza el ex jefe del SIS va a permitir aclarar muchas cosas, entre ellas la inocencia de este funcionario. ¿Por qué pienso así? Porque simplemente lo achacado a este funcionario dependió de otras manos y otros funcionarios, estando los hechos realmente graves vinculados a otros funcionarios del gobierno, del más alto nivel, que están haciendo cabildeos comprometedores para proteger al Ministro de Salud.
Lo certero, es que este segundo gobierno está superando con creces la corrupción del primer alanismo. Y si a esto le agregamos la necesidad de hacer investigaciones en Construyendo Perú y ESSALUD del Ministerio de Trabajo, en Agua para Todos del Ministerio de Vivienda, en el Ministerio del Interior, en las computadoras del corrupto Ministerio de Educación, en el INEI de la PCM con su falso censo, etcétera, etcétera, veremos el real daño que la corrupción de alto vuelo le viene infringiendo al país.