La "escuelita" de la Av. Abancay

No podemos estar de acuerdo con medidas tan simplistas como la de forzar la asistencia al Congreso a partir de la amenaza de publicar en los medios los nombres de los congresistas "faltones".
La política en nuestro país ha llegado a un nivel similar al colegial. Y esta imagen deplorable de los parlamentarios ha sido construída a pulso por la presidencia tanto de Luis Gonzáles Posada como de Mercedes Cabanillas.
Recuerdo, por ejemplo, la forma como trataba la señora Cabanillas a los señores parlamentarios sin experiencia. ¡Cállense!, ¡No se muevan!, etcétera, eran algunas de las frases con que se trataba a los parlamentarios.
La política en nuestro país está devaluada. En esto también se parece el actual gobierno a su anterior administración, en que gracias a su penoso comportamiento, trajo el concepto de "político tradicional" que luego explotó Alberto Fujimori.
La política no se puede devaluar con actitudes así. Sin embargo es importante que el Congreso recupere su ánimo de control político, tan necesario en un régimen democrático. En ese sentido, es digno de reconocer el informe que el Parlamento acaba de emitir respecto a la sobrevaluación de la Vía Expresa del Callao, inspirada en una conversación de Alex Kouri y Vladimiro Montesinos.